Los drones sustituirán a los jefes de obra
Sus cámaras registran el progreso del nuevo estadio de los Sacramento Kings para detectar los retrasos no planificados
Para algunos trabajadores de la construcción, cualquier idea de escaquearse del trabajo pronto podría parecer algo anticuado. Los drones seguramente darían cuenta de ello.
Los trabajadores que construyen un lujuso estadio nuevo en pleno centro de la ciudad para los Sacramento Kings en California (EEUU) están siendo monitorizados por drones aéreos que incorporan un software para detectar retrasos de forma automática.
Una vez al día, varios drones patrullan la obra, recogiendo imágenes en vídeo que se transforman en una imagen del emplazamiento de la obra en 3D, que luego se introduce en un software que lo compara con los planes arquitectónicos informatizados además del plan de construcción que muestra cuándo cada elemento debería estar terminado. El software puede mostrar a los jefes de obra cómo progresa el proyecto, y puede señalar de forma automática las partes que se pueden estar retrasando.
"Destacamos lugares en situación de riesgo dentro de la obra, donde la probabilidad de sufrir problemas es muy alta", explica Mani Golparvar-Fard, un profesor auxiliar de la Universidad de Illinois (EEUU) que desarrolló el software con varios compañeros. Puede indicar, por ejemplo, que un elemento estructural concreto no está cumpliendo con el calendario establecido, quizás por la falta de algún material. "Permite entender por qué se producen los incumplimientos, y observar dónde se realizan mejoras en la eficiencia", dice Golparvar-Fard.
El proyecto señala cómo las nuevas tecnologías permiten monitorizar y analizar la mano de obra, y llega mientras la productividad en otras áreas, como muchos trabajos de oficina, está siendo analizada en mayor profundidad mediante software de escritorio y de smartphone.
Este mayor escrutinio ha resultado controvertido. Suscita preocupaciones por la privacidad de los empleados, por ejemplo, y el temor de que se presione a las personas a trabajar horas excesivas.Golparvar-Fard reconoce que podría plantear problemas, pero defiende la idea. "No es algo nuevo en la industria de la construcción que haya personas que se queden plantadas de pie, observando las operaciones, o que existan cámaras fijas", dice. "Sí, hacerlo de forma autónoma puede ser percibido de una forma distinta por los trabajadores. Pero hay que tener en cuenta que realmente no cuestiona la eficiencia de los trabajadores, cuestiona los recursos que necesitan para ser más eficientes".
Tales preocupaciones no están ralentizando el desarrollo de la tecnología requerida para monitorizar los trabajos de construcción. La caída del precio del hardware de los drones y la disponibilidad de sofisticado software para el control, la navegación y la planificación ya han ayudado a que los vehículos aéreos tengan un gran impacto en la industria de la agricultura (ver TR10: Drones agricultores).
La monitorización de una actividad por todo un emplazamiento de obra compleja resulta especialmente difícil porque hay muchas partes en movimiento, y porque los trabajos que se realizan cambian constantemente. Un informe publicado en 2009 por el Consejo Nacional de Investigaciones de las Academias Nacionales de Estados Unidos concluyó que la construcción se queda rezagada en productividad en comparación con otras industrias como la fabricación , y culpó de la situación a los problemas de planificación, coordinación y comunicación.
En el proyecto de Sacramento, el vídeo es captado por una empresa operadora de drones llamada ImageInFlight. El software desarrollado por el equipo de la Universidad de Illinois puede mostrar cómo distintos equipos de subcontratados trabajan juntos.
Lincoln Ford, el director regional de Diseño Virtual y Construcción de Turner Construction, que dirige la obra de Sacramento, dice que mientras que es una práctica común monitorizar de cerca los progresos de la obra, las imágenes aéreas casi en tiempo real y el análisis mediante software que se están empleando allí proporcionan una visión más completa de lo que está pasando, y puede señalar el efecto que tendrá el retraso de un área sobre el proyecto global. "Lo bueno es que muestra todas las tareas de un área, y así se ve el impacto global", explica.
El software diseñado por el equipo de Golparvar-Fard también se está siendo empleado en la construcción de un rascacielos en Arizona (EEUU), y por Taisei, una gran empresa japonesa de la construcción.
El equipo de la Universidad de Illinois actualmente está probando un sistema que permitiría que los drones fijasen cámaras en ubicaciones por todo el emplazamiento de obra, para que la actividad se pueda monitorizar de forma continua. En los experimentos, también están utilizando una plataforma de crowdsourcing para categorizar el contenido de vídeo según las actividades de los trabajadores. Así, el jefe de obra puede ver cómo se están realizando diferentes tareas, y cuánto tiempo dedica cada individuo a una tarea.
Este nivel de vigilancia podría resultar aún más controvertido. Un portavoz del Sindicato Internacional de los Trabajadores de Norte América dijo que la organización no estaba al tanto de tales tecnologías, y rehusó hacer comentarios.